Por: Yolanda Sánchez Ogás
En 1911, el gobierno mexicano, interesado en acelerar el desarrollo económico-agrícola, hizo llegar al gobierno chino, un plan de investigación de 43 puntos que concluía, entre otras cosas; producción de los principales cultivos, ingreso de campesinos, remuneraciones de los asalariados agrícolas y sus condiciones de vida, migración interna y externa de la población rural, reglamento de contratación de asalariados agrícolas y administraciones respectivas por parte del gobierno y terratenientes. El ministerio de Agricultura, Industria y Comercio de la dinastía Ching, respondió por escrito punto por punto. Al recibir la respuesta, la delegación mexicana, envió un oficio de agradecimiento al Ministerio de Asuntos Exteriores del gobierno chino1.
En 1910, la Colorado River Land company, dueña de las tierras del valle de Mexicali, vendió a la empresa estadunidense Cudahay, 13 000 hectáreas de sus terrenos. El proyecto de esa compañía era sembrar algodón y criar ganado. Las tierras se encontraban enmontadas y eran necesarios muchos trabajadores para limpiarlas, nivelarlas, abrir caminos y construir canales. La interrogante era donde conseguir esos trabajadores. Los trabajadores mexicanos que llegaban a Mexicali, preferían pasarse al Valle Imperial, donde recibían mejores salarios. Se pensó en contratar jornaleros chinos.
Después de la inundación de 1905-1907, los estadunidenses temían que se repitiera el fenómeno natural y arrasara con sus siembras del Valle Imperial. Solicitaron al gobierno mexicano permiso para construir un bordo que detuviera el agua. En diciembre de 1910, el gobierno de México autorizó al de Estados Unidos, la construcción de un bordo para proteger al valle de una nueva inundación. La obra fue dirigida por el ingeniero John Ockerson. En el libro “El valle de Mexicali y la Colorado River Land Company 1902-1946”, se menciona:
“El primer contingente de más 50 chinos llegó a fines de 1910 o principios de 1911, a trabajar, por extraño que parezca, en el dique construido por el gobierno de Estados Unidos”2
Cuando la Colorado empezó a rentar sus tierras, fue necesario traer chinos para trabajar en el campo. En ese tiempo estaba vigente el convenio de Amistad y Comercio firmado entre el gobierno de China y el de México en 1899. Este permitía la entrada a México de personas de nacionalidad china. Este facilitó la entrada de chinos a México, contratados para trabajo agrícola. Los chinos llegaron vía San Francisco-Mexicali. Estuvo vigente hasta 1921. Con la entrada de presidentes sonorenses, las condiciones para la llegada de chinos se endurecieron.
El señor Antonio Yee Chein fue entrevistado por el periodista Enrique Estrada Barrera en 1973. Tenía 85 años, pero recordaba con detalle su salida de China y llegada a Mexicali. Mencionaba que el grupo salió de Cantón la mañana el 16 de febrero de 1911, cuando él era un niño de trece años. Llegaron a San Francisco, sin documentos legales y por ello decidieron venirse a Mexicali. Allá tomaron el tren que los condujo a Mexicali. Su primer trabajo fue en el corte de mezquite que entregaba en el ferrocarril para que la embarcaran para una fábrica de madera en Estados Unidos. Con el tiempo, cuando tenía 22 años se casó con una mexicana. Antonio Yee Chein, recordaba:
“Cuando mí llegando Mexicali…toto…tolo… estaba limpio, nada se veía. Había casitas, pero no mucha…veníamos 200 paisano desde Cantón, China. Élamo lo plimelo paisano que llegando Mexicali… Mi llegando, trabajando luego, luego, coltando leña con un hacha…Uno año, coltando leña, pelo entonce, no había camino…no había nala, pulo telegal, pulo bullito y mula; los calito de entonces elan ya lo folcito…había uno cuanto calito, que tenían lo lico de Mexicali”
No existen registros exactos de los chinos que llegaron contratados para trabajar en el valle de Mexicali, pero según la historiadora Dorothy Kerig, en los meses de pizca, que era cuando se requería más mano de obra en el campo, de septiembre a junio, se ocupaban alrededor de cinco mil jornaleros. Se considera que en esos meses la población china llegaba a ser hasta el 42% de la que se ocupaba en el valle3 .
Durante la crisis del algodón, en 1931 a 1933, el gobernador Carlos Trejo Lerdo de Tejada en su periodo de gobierno, expulsó a 2000 chinos4. En 1934, después de la crisis económica mundial que se reflejó en Mexicali con la pérdida de agricultores sembradores de algodón y la consecuente pérdida de trabajo para los mexicanos, el presidente sonorense Abelardo L. Rodríguez, quien fue gobernador de Baja California de 1923 a 1929, creó un decreto que prohibía la entrada de asiáticos a Baja California.
En 1936, el presidente Lázaro Cárdenas cambió la ley de población. Ya no se buscaría la colonización con ciudadanos de otros países; se buscará poblar el norte con ciudadanos mexicanos residentes de México y Estados Unidos. Para 1936, en Mexicali habitaban 33 500 personas, de los cuales, 1000 eran chinos.
En la ciudad el primer registro de chinos fue hecho por el subcolector de impuestos, quien en 1912 registra a 12 comerciantes chinos: Lem Toi, Luis Wong, Quong Yick mataban ganado, Quong Wings y Chim Sin tenían expendios de licores y tabaco, Chale Wong y Quong Nam tenían fondas.
Los chinos se asentaron en la manzana ubicada de avenida Juárez a Reforma y entre las calles de Azueta y Altamirano. En la memoria catastral levantada en 1918, se registran las viviendas y comercios de 25 chinos, el resto pertenecía de los comercios pertenecía a mexicano. Ese año, el empresario Wong Siw Nam de San Francisco; abrió algunos comercios, y la manzana empezó a conocerse como “la chinesca”.
La existencia de miles de chinos en Mexicali, es un mito, que actualmente, con fines mercantiles, se ha profundizado hasta caer en la falsedad histórica de aseverar que fueron los fundadores de Mexicali. En este 120 aniversario, es justo recordar a esos mexicanos que llegaron del sur del distrito y se asentaron en lo que ahora es Mexicali, los verdaderos fundadores de nuestra ciudad.
1 Auyón Gerardo. Eduardo. El Dragón del desierto. Pioneros chinos de Mexicali. Mexicali, B. C. 2003. p 16
2 Kerig. P. Doroty. 137, 139
3 Kerig. P. Doroty. Op. Cit. 137,139)
4 Trejo Lerdo de Tejada. Carlos. Norte contra sur. Obregón-Calles-Ortiz Rubio. Ensayo de sociopolítica mexicana. Baja California Nuestra Historia. UABC. México 2007. P. 75