Por Roberto Valero
Presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California
La pobreza que enfrenta Baja California ha alcanzado niveles preocupantes a pesar de que continúa vendiendo el grupo de Marina del Pilar que el empleo está creciendo.
Verdades a medias. Cierto, durante abril la cifra total del mes fue de 2 mil 111 y quién no diría que es bueno, especialmente porque ya se recuperaron los empleos perdidos a fin de año; sin embargo, el dato se esconde tras una máscara perversa dejando verdades a medias en el discurso gubernamental.
Y es que el empleo precario en el sector formal de la economía de Baja California continuó a escondidas su marcha imparable, al sumar 4 mil 363 puestos de hasta 2 Salarios Mínimos (SM), de acuerdo con las cifras que dio a conocer el IMSS.
Comparado contra el total indica que nuevamente el rubro de hasta 2SM continúa creciendo a costa de la reducción de los ocupados en los niveles salariales superiores, particularmente en los grupos de más de 5 SM.
Con el dato dado a conocer por el IMSS, la cifra de nuevos ocupados formales con hasta 2SM en Baja California, se elevó a una histórica cifra de 94 mil 825, casi el triple del total, que se ubicaron en 32 mil 899 en los cuatro primeros meses del año.
Lo anterior es una muestra clara de la clase de empresas que están llegando al Estado. Vienen por la mano de obra barata para hacer el trabajo menos calificado del proceso productivo, a diferencia de lo que está sucediendo en Nuevo León y el grupo de El Bajío (Querétaro, Guanajuato, Jalisco, San Luis Potosí y Aguascalientes).
En estas entidades se localizan tres centros de producción de muy alto nivel con importantes centros de investigación, donde por cierto, ya laboran muchos profesionistas bajacalifornianos.
El Jalisco es conocido como el Silicon Valley de América Latina por su fortaleza en las tecnologías de comunicación; Querétaro es el principal centro aeroespacial de México destacando Bombardier y Safran; mientras que Guanajuato está convertido en el principal centro armador automotriz de Latinoamérica. Todos priorizan el desarrollo, por ello la Universidad Aeronáutica y Guanajuato promueve la “mentefactura”.
Obviamente ello repercute en mejores salarios y también en un mayor crecimiento y desarrollo de esas entidades.
Durante la pandemia pregunté a un funcionario de una empresa en Guadalajara si habían despedido a muchos obreros. Me respondió con una pregunta: “¿obreros?”
Y agregó, “No, aquí no tenemos obreros, puros ingenieros en investigación y desarrollo. Los obreros están en la frontera”.
Saque sus conclusiones amigo lector.
¡Hasta la próxima!