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La transformación del empleo en BC, cuando el destino nos alcance: robotización amenaza con borrar alrededor de 150 mil empleos de obreros

 

La transformación del empleo en BC, cuando el destino nos alcance: robotización amenaza con borrar alrededor de 150 mil empleos de obreros

Por Roberto Valero*/Infosavia

En 1995 el canadiense Jeremy Rifkin alertó al mundo acerca del avance de las tecnologías y los cambios que ya se estaba generando en el mercado de trabajo. A casi 30 años de distancia, la situación planteada por Rikfin no solamente se cumplió, sino que se aceleró y Baja California no la está atendiendo. 

Los economistas de las escuelas más prestigiosas hoy vuelven la mirada a la innovación, el cambio tecnológico y la disrupción económica, como elementos que determinan la dinámica y el bienestar económico de un país, pero también alertan ante el impacto que está ocasionando en el mercado de empleo, el cual está registrando profundas y rápidas transformaciones que asestarán fuertes golpes a economías, como la de Baja California, si continúan soslayando tal escenario. 

En una de sus recientes ediciones la influyente revista Harvard Business Review habla de la Recapacitación en la Era de la Inteligencia Artificial (IA) y señala entre otros aspectos que en los actuales tiempos de disrupción, los cambios están reflejando profundas transformaciones entre los que destacan el envejecimiento mundial de la población y la emergencia de nuevas ocupaciones en las que la capacitación de sus empleados ahora será permanente. 

Las empresas van a requerir no solamente de trabajadores con nuevas habilidades, sino saberlas usar para cambiar de ocupación, señala la revista. 

Así, el empleo coexiste con nuevas tendencias demográficas, económicas, ambientales y un aceleramiento de la automatización de las tecnologías vía la Inteligencia Artificial, todo esto en el contexto de lo que ya es conocido como la Cuarta Revolución Industrial, recordando que la palabra “revolución” indica un cambio abrupto y radical. 

Klaus Scwab en su libro La Cuarta Revolución, nos dice que esta inició con el nuevo siglo, basada en lo digital, con un Internet ubicuo, sensores más pequeños y potentes, más baratos y con una aceleración en su velocidad después de la pandemia, cuando además fue acompañada por el brinco de la Inteligencia Artificial vía el ChatGPT. 

En este sentido, no podemos soslayar que fue precisamente en ese momento cuando El Bajío desplazó a BC en captación de capitales y peso en la economía nacional, mientras aparecían nuevos competidores en el plano internacional que surgieron tras la caída del bloque comunista. 

Así las cosas, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Oxford el 47% de las profesiones desaparecerán en los próximos años; el 8% de los trabajadores tienen ocupaciones que probablemente crecerán en los próximos 10 o 15 años y un 21% están en profesiones que muy probablemente disminuyan. 

En concreto el mercado laboral que hay al frente cambiará radicalmente en pocos años.

Refiere además que los debates recientes sobre el futuro de los empleos se han centrado principalmente en si corren o no riesgo de automatización, pero recuerda que esto va más allá: 

“En general, los estudios han minimizado los efectos potenciales de la automatización en la creación de empleo y han tendido a ignorar otras tendencias relevantes, como la globalización, el envejecimiento de la población, la urbanización y el auge de la economía verde”. 

Y señala que el nuevo profesionista debe estar preparado para desarrollarse hasta en 3 profesiones diferentes durante su vida profesional.

Y mientras esto se maneja a nivel profesional, en Baja California se presume con frecuencia que somos la entidad con más ocupados en las maquiladoras. Esto es una mala noticia pues los obreros ocupan el quinto lugar de empleos sin futuro. 

El pronóstico es que en el mediano plazo se borrarán al menos el 50 por ciento de los empleados obreros (336 mil 569). 

A esto habrá que sumarle lo que resulta de la evolución de las compras en línea pues diferentes ocupaciones vinculadas al comercio y servicios en persona están en vías de reducirse, de hecho se puede apreciar en comercios de las vecinas ciudades norteamericanas en las que el comercio electrónico ya recibe más atención. 

De tal forma, ocupaciones como secretarios administrativos y ejecutivos, empleados contables, obreros de fábricas y de cadenas de montaje, representantes de ventas, vendedores y directores de recursos humanos entre otros, están en vías de extinción. 

En cambio especialistas de Inteligencia Artificial, marketing digital, automatización de procesos, experto en desarrollo empresarial, analistas de seguridad de la información, desarrolladores de aplicaciones, profesionales en redes y bases de datos e ingenieros en robótica, entre otras, están en auge. 

De esta manera, en el nuevo entorno no habrá lugar para el empleo basura y se dispondrá de menos jóvenes. El crecimiento de la población de 60 años y más en BC corrobora la importancia del cambio demográfico señalado por diferentes estudios.

Pero el gobierno sigue aferrado con ver solamente a los niños y descuidando la generación de empleo con alto valor agregado como muestran las cifras de desempleo en las que más del 50% de los desocupados en el Estado tienen estudios de nivel medio superior y superior; sin embargo, como hemos dicho en otras ocasiones, lo peor es que se están yendo de Baja California. 

Queda claro entonces que el reto es el aprendizaje permanente hasta niveles de alta especialización y quienes están en los “40s” les espera una carrera más larga ante el avance de la esperanza de vida. 

Refiere el estudio de Harvard que “Los únicos que están en riesgo son tanto los empleados como las empresas que se sientan muy cómodas”. 

Así, el futuro laboral consiste en no dejar de aprender, parafraseando al académico Luis Lloréns, aprender a desaprender y aprender constantemente y en este escenario las universidades serán grandes protagonistas al recibir a muchos profesionistas de regreso para estudiar nuevas carreras y muchos otros para incorporarse a cursos de educación continua pues la vigencia del conocimiento adquirido con los grados académicos no tendrá vigencia larga. 

Así, cuando el futuro es incierto, la educación ya no es el objetivo, es el camino.

Con esta ola comenzaremos a hablar del “knowmad”, concepto con el que la escritora Raquel Roca define a los nuevos profesionales nómadas del conocimiento, y que señala que si bien el futuro será para los robots, sí, pero junto con quienes sean capaces de surfear las constantes olas de cambio brincando de una ocupación profesional a otra. 

Asimismo, deberán elevar sus niveles de especialización y con una vida laboral que se extenderá hasta los 70 años o más, a medida que el envejecimiento demográfico mundial (de Baja California y México incluidos) se acelere y se potencie la diversidad intergeneracional, con 4 o 5 más generaciones coexistiendo en el centro de trabajo. 

En este escenario nuevamente Europa está poniendo el ejemplo y ya trabaja en una agenda digital de capacitación para sus trabajadores y sus metas ya están a la vuelta: 2030. Su meta es que el 80% de la población adquiera capacidades básicas y de ahí para arriba.

Asimismo se busca una asimilación tecnológica del 75% de las empresas; impulso de innovadores y que al menos del 90% de las pymes alcancen un nivel básico de educación digital. 

Ahora, la gran pregunta es cuánto tiempo va a esperar Baja California antes de comenzar a trabajar en ello, tal como ya lo hace Guanajuato con su Mentefactura, para dejar atrás el empleo basura.

* Presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California